Seguro que te lo has preguntado alguna vez…

Preguntas que has tenido siempre sobre la biomasa

¿Cuánta electricidad consumen las estufas de pellet?

Existen estufas que no consumen electricidad e incluso generan la electricidad necesaria para pequeños aparatos externos como móviles. Dentro de los componentes de una estufa de pellets existen normalmente varios elementos electrónicos: ventiladores, sistema de encendido, alimentación del quemador o el control de la combustión, que ayudan de una manera determinante a que sea lo más eficiente posible. También consiguen que su uso sea más sencillo y cómodo.

El mayor consumo se produce en el momento del encendido y una vez se genera la llama el gasto eléctrico se modera. El consumo depende de varios factores, siendo el más determinante la potencia de la estufa. Los consumos se encuentran entre los 60 y los 200 W. Lógicamente, a mayor potencia, mayor consumo.

El consumo de una estufa de pellets es muy inferior al de electrodomésticos de uso común. Es términos económicos, una estufa de 8 kW consumiría un céntimo de euro a la hora  tomando como referencia el precio medio de 0,184 euros el kWh en España.

Una estufa de pellets de aproximadamente 8 kW de potencia, suficientes para calentar un habitáculo de más de 60 m², tiene un consumo medio de 80 Wh. El consumo medio de una televisión es de 200 Wh; el de un microondas, de 700 Wh;  la tostadora, 1000 Wh; y una nevera combi, categoría A, 150 Wh

Estufa, caldera, chimenea… ¿Qué opción me interesa más?

Depende de cada caso. Si se trata de calentar un piso, un apartamento o una oficina, solo con aire caliente y mínima obra, con una estufa de pellets o una chimenea encastrada puede ser suficiente, incluso para calentar varias habitaciones.

Si se necesita calefacción por radiadores o suelo radiante y agua caliente sanitaria (ACS), lo recomendable es una caldera doméstica si se dispone de espacio suficiente. También se puede instalar una termoestufa que calienta la habitación y los radiadores de la vivienda, incluso el ACS.

¿Puedo instalar una estufa o caldera de biomasa en cualquier vivienda o local?

Lo recomendable es concertar la visita de un técnico especializado para poder evaluar los aspectos concretos cada inmueble. La salida de humos hasta cubierta y el almacenamiento del pellet son algunos de los factores a los que hay que prestar atención para buscar una solución individualizada.

Sin cuotas mensuales, con una gama variada de modelos y potencias, y con la tecnología puntera existente hay prácticamente una solución óptima que satisfaga nuestras necesidades.

¿Puedo utilizar una chimenea antigua?

Dentro de la estufa de biomasa se produce una combustión, y como resultado se genera humo que hay que sacar al exterior de la vivienda. Esta salida de humo se realiza a través de un tubo, generalmente de entre 8 y 10 centímetros de diámetro interior. Este tubo debe estar homologado para evitar sobrecalentamiento, incluso si se prefiere se puede elegir un tubo con aislante que evita más aún el calentamiento.

Se puede utilizar el hueco de una antigua chimenea para meter el tubo de salida del humo, siempre y cuando tenga el tamaño suficiente.

¿Dónde comprar biomasa… y a qué precio?

Actualmente ya hay varios de miles de puntos de venta de pellets en sacos de 15 kg: centros logísticos, distribuidores, hipermercados, tiendas y centros de bricolaje. Por otra parte, también existen varios cientos de suministradores de pellets y astillas a domicilio en camiones.

El precio suele variar en función de la marca y el servicio prestado. Por supuesto, no es lo mismo comprar un saco de 15kilos que comprar 70 sacos, o que lo lleven a casa. El Índice de Precios publicado trimestralmente por AVEBIOM indica que el precio está estable desde hace años: el saco de pellets ENplus®  A1 de 15kilos suele costar en torno a cuatro euros, unos 0,26 €/kg; y si traen pellets ENplus® A1 para una calefacción a casa a granel el precio medio se sitúa alrededor de los 0,24 €/kg.

¿Cómo se transporta el pellet? ¿Y cómo se almacena?

Los pellets pueden transportarse y almacenarse de dos forma principalmente: en sacos y a granel.

Existen sacos de 15 kilos en infinidad de puntos de venta y distribuidores: tiendas, supermercados, centros de bricolaje, ferreterías, distribuidores especializados de biomasa, gasolineras, almacenes de construcción, entre otros. Pueden comprarse por unidades o palets. Además, el distribuidor puede llevarlo a casa.

El pellet a granel se usa sobre todo para estufas o calderas con entrada automática. Requiere un silo o depósito de pellets diferente al propio de la caldera. Hay diferentes tipos de silos: textil, plástico, tipo tolva de metal o silo de obra, que depende principalmente de tipo de instalación, presupuesto  y espacio disponible. El silo distribuidor se llena con pellets en grandes sacas (TIPO BIGBAG) con capacidad de almacenamiento entre 500 y 2.000 kilos; en camión cisterna similar a los que entregan gasoil con bocas de llenado automático, o si son grandes cantidades en camiones de piso móvil con mayor capacidad.